La risa inanimada

miércoles, 30 de julio de 2008

Voy poniendo orden al caos.Mi libro con capítulos perdidos en el limbo, y hojas caídas y cubiertas por el polvo que se ha depositado tras un largo y duro invierno en el que el frío quemaba y la soledad me amordazaba.
Con cuidado voy retirando la sangre seca de heridas que nunca debieron existir. Aún así, siento el pellizco mientras se va desprendiendo de mi nueva piel, más madura; más dura.
Pienso si ha valido la pena lo andado, si está justificado poner pies en polvorosa; o si perder el partido es esto.
Nada se había roto, sólo había que cambiar algunas piezas que ya no encajaban en el rompecabezas. Darle la vuelta a la tortilla por la fuerza. À la rechercher du temps perdu, como diría Proust.
¿Qué más da hoy? Lo importante es un nunca más mañana...